Se vale rebobinar

cardigans.jpgQue una decisión siempre puede ser modificada. Que el término «rebobinar» tiene menos valor en el mundo del que debería. Que el cambio es la vida misma.

Nada de vender sensiblería a granel. Nina Persson se mostraba despreocupada y hasta indolente cada que empuñaba el micrófono para canturrear «Erase/Rewind», segundo single con el que The Cardigans, una banda de momentos, impulsó el álbum que logró ser puntiagudo, sonar fuerte y causar más aplausos de los presupuestados. Sucedió en la agonía de 1998 y el amanecer de 1999, en los tiempos en que la agrupación capitaneada por la rubia llevaba meses saboreando el elogio casi unánime de la crítica tras poner en órbita «My Favourite Game».

«La canción habla acerca de preservar el derecho que uno tiene a cambiar de opinión. Habla del hecho de no mantenerte estático y de la importancia de ser dúctil», manifestó Nina con una sonrisa tímida durante la filmación del respectivo video, justo antes de la Navidad de 1998. Recuperando elementos visuales de Star Wars y 2001: A Space Odissey, el clip dirigido por Peter Berg fue un fenómeno, favorecido por un tremendo empujón promocional de parte de MTV hacia el final del siglo.

Las explicaciones de Persson contemplaban no solamente los intestinos de la composición que terminó como segundo track del disco, sino el abrupto y total cambio de ruta que la cuadrilla hizo. Se exhibía la esencia, pero también la facha. La quinteta había decidido degradar su pasado y retorcer las viejas costumbres para dar paso a toda clase de experimentación, desde avivar la crudeza en las guitarras hasta acentuar el delineado en los ojos de gato de su lideresa. Aspereza y destemplanza. Se gestaba un contraataque a su propia historia -de la que habían brotado cúspides musicales como «Carnival» y «Lovefool»- y a todo lo que habían producido desde que rompieron el cascarón.

«Siempre hemos buscado mantenernos abiertos a cambiar la dinámica en nuestra música, a buscar nuevos horizontes», decía en el mismo set de filmación Peter Anders Svensson, guitarrista, coescritor de «Erase/Rewind» y hombre que detentaba el poder real, pero invisible, al interior del proyecto escandinavo.

Y así, la reinvención llevó a The Cardigans a pegar con tubo en varias capitales de Europa mediante el sencillo que se volvió un clásico de su discografía y un básico de sus recitales: séptimo puesto en Reino Unido, tercero en Islandia y décimo en Escocia, por mencionar sólo unas pocas conquistas.

Años después del impacto muy por encima de la media de Gran Turismo, el grupo estrechó el nexo con sus seguidores y utilizó su portal oficial para responder dudas, inquietudes y rumores. Uno de ellos, argentino de nombre Federico, quiso ahondar en el armazón narrativo de «Erase/Rewind» en mayo de 2007, y lo hizo a nombre de varios viajeros de la red que querían conocer la identidad del hombre que había inspirado a la vocalista. Aunque franca e inmediata, la contestación del bajista Magnus Sveningsson aportó poca luz. «En realidad desconozco los detalles. Posiblemente Nina salía de una relación en aquellos tiempos. No tengo idea, han pasado ya nueve años.»

Queda claro que con el alargue del tiempo, la mente falla y un sinfín de recuerdos son desvalijados por la edad. Por eso hay que darle rewind a ciertas cintas personales… y musicales.

«I’ve changed my mind, I take it back, erase and rewind… ‘cause I’ve been changing my mind, I’ve changed my mind…»

 

Anuncio publicitario

Opina en Radiolaria

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: