RADIOLARIA

Chris Martin siempre ha definido a «In My Place» como la piedra angular y canción pivote de su álbum A Rush Of Blood To The Head.

Interesantes conceptos especialmente si se toma en cuenta que la pieza fue trabajada después del lanzamiento de su disco debut, Parachutes, y que estuvo a punto de ser excluida igualmente del listado final de cortes de la mencionada segunda placa, editada en 2002.

Fue hasta que el guitarrista Jonny Buckland la hizo sonar en una tarde perdida que Martin rescató la pieza y decidió pulirla al grado de considerarla, al final, como el primer sencillo promocional del nuevo proyecto. La composición implicó repetidos choques de ideas entre los miembros del cuarteto británico, a pesar de que ya había sido parte de sus primeros recitales.

Melancólica y siempre aplaudida en los conciertos de la banda desde su debut en directo el 2 de octubre de 2000 en Cambridge, «In My Place» fue interpretada ante Jools Holland y Conan O’Brien como parte de una promoción intensa, además de llevarse una gran ovación en los MTV European Music Awards.

«Esa canción fue crucial para nosotros. Si no hubiera sido por ella, quizá habríamos empacado nuestras cosas y ya, porque nos hizo seguir adelante, a través de todas esas cosas raras que se dieron durante la etapa de nuestro primer álbum y cuando llegaron las críticas. Incluso nos dio cierta libertad para crear otras canciones», dijo Martin en su momento ante AOL.

A Chris se le cuestionó mucho en aquel tiempo su decisión de no incluir las letras de los temas en la libretilla del álbum. Argumentaba simplemente que dichos líricos no eran tan buenos como la gente pensaba y, además, impedían al oyente apreciar la música de una forma más pura. Aun así, intentó explicar las verdades detrás del sencillo en una charla con la revista Q.

«Es acerca del sitio en el que has sido colocado dentro de este mundo y sobre cómo te ha sido asignada tal posición, el cómo te ves y el modo en que asumes y te comportas ante esto».

Una definición simple para una creación medular sin la cual Coldplay tal vez hubiese desaparecido como banda, tal cual se lo confesó el líder de la cuadrilla a Jon Wierderhorn, de MTV: «De pronto fuimos atacados por todo, pero cuando hicimos ‘In My Place’, fue agradable sentir que al menos había un disco más en el horizonte».