En 1991 se lanzó una de las canciones que, a juicio de muchos, es la composición perfecta del thrash metal: «Arise».
«Tiene la velocidad de muchas otras canciones, pero a la vez cuenta con influencias hardcore. En cuanto a la letra, mantiene vigencia, ya que trata sobre la gente que llega a matar a otros simplemente porque creen en una clase diferente de divinidad o profesan otra religión», explicaba justo en aquel año Max Cavalera, el otrora líder de Sepultura que siempre ha sido fiel a su look de rastafari metalero.
La sola mención de «Arise» como sencillo de un álbum (del mismo título) que, por cierto, fue un soplo de aire fresco para dicha corriente musical, aún hace mella en los fans de la mítica agrupación de Belo Horizonte. De tal recuerdo deriva a su vez la alineación ideal para muchos, la cual solía apalear multitudes con su furia: Max, su hermano Igor, Andreas Kisser y Paulo Jr. De ellos, únicamente los dos últimos permanecen en lo que los seguidores más puristas ya no reconocen como Sepultura.
Si bien la actividad de la banda brasileña no ha bajado desde la salida de los Cavalera en diferentes momentos, la aceptación de los devotos es mínima en comparación a aquellos tiempos. Cientos de miles de melómanos se han alejado de las giras recientes del grupo que en 1984 fundaron y bautizaron Max e Igor, luego de la repentina muerte de su padre y de una severa crisis familiar derivada del deceso. Por eso llamaron a la banda Sepultura.
«La única posibilidad de juntarnos existe porque estamos vivos. No estamos trabajando en eso, nosotros somos Sepultura, Max está con Soulfly y Cavalera Conspirancy, Igor está muy feliz también con Mixhell y haciendo otras cosas. Entonces, ahora no hay ninguna posibilidad de reunirnos», aclaró Kisser en 2012.
Así pues, muchos años después de que sonaran los acordes gloriosos de «Arise» y sin aparente posibilidad de juntar las piezas del pasado, la agrupación que se niega al retiro parece estar enterrada viva por sus propios fanáticos. Sepultados, pero respirando…
Opina en Radiolaria