He leído comentarios de todo tipo tras el concierto del jueves por la noche que brindó Ladytron en la Ciudad de México. Es comprensible. Hubo un retraso de más de dos horas y un show de 61 minutos de duración. Ese tema no tiene justificaciones. El cuarteto de Liverpool se ha brincado las reglas de la cortesía y la puntualidad… con sus consecuencias: molestia de parte de los fans y repetidos abucheos en las redes sociales.
Por lo demás, hablando estrictamente de la música expuesta a lo largo de 61 minutos, no hay queja alguna. Si bien en un inicio las voces de la búlgara Mira Aroyo y la escocesa Helen Marnie quedaron un tanto más bajas que los sintetizadores, el resto ha sido glorioso. Las notas de Ladytron no dejan de ser una exquisitez.
Fueron apenas 13 temas (no 14, como erróneamente señalan otros portales), pero soberbios. Daniel Hunt y Reuben Wu hicieron que la noche sonara como pocas veces, a pesar del nada conveniente escenario y del clima, el cual entregó a la mitad del concierto un despiadado aguacero que puso en entredicho la continuación del mismo.
La frialdad y los atuendos oscuros son el complemento perfecto de un cuarteto al cual, en el inicio de su gira para promover Gravity The Seducer, le interesa proyectar precisamente esa imagen frívola. Así que no hay inconsistencias.
Hace dos años, Brian Eno los catalogó como «el mejor pop británico en el mundo», así que, en resumen, la verdadera cuestión está en saber si escuchar una hora de la mejor música de Reino Unido es más conveniente que dos horas de bandas de menor nivel.
A juicio.
Setlist – 220911 –
Runaway, High Rise, Ghosts, International Dateline, True Mathematics, Little Black Angel, Discotraxx, Mirage, Ace Of Hz, Fighting In Built Up Areas, Seventeen // White Elephant, Destroy Everything You Touch
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