The Cure nunca se ha caracterizado por ser una banda de impulsos ni polémica. Sin embargo, la siempre curiosa excepción se dio el 5 de julio de 1981, cuando la banda de Robert Smith tocaba como acto preliminar de Robert Palmer en el escenario principal del festival Rock Werchter.
Había transcurrido poco más de media hora de show de The Cure cuando el staff de Palmer, ya impaciente, amenazó una y otra vez con desenchufarlos si no acortaban su set. Ante ello, y con la anuencia para interpretar una pieza más, Smith le dijo a la concurrencia: «This is the final song because we are not allowed to carry on anymore. Everybody wants to see Robert Palmer, I think. It’s called ‘A Forest’«.
Sobra decir que el trío que completaban el bajista Simon Gallup y el baterista Lol Tolhurst improvisó un elegante acto de rebeldía interpretando una versión larguísima de dicho tema. Cuando atravesaban los cinco minutos y 33 segundos de melodía, Smith y Gallup se acercaron para concretar tal idea. Así, «A Forest» sufrió una linda metamorfosis que culminó tras nueve minutos majestuosos.
Para rematar, Gallup tomó el micrófono y lanzó un grito que pasaría a la historia y encumbraría a los todavía pequeños chicos de Crawley: «Fuck Robert Palmer, fuck rock ‘n roll!«.
La estampa de la multitud aplaudiendo y pidiendo más no se borraría, a pesar de que el staff de Palmer se encargó de arrojar el equipo de The Cure al suelo detrás del escenario.
Habían conquistado Bélgica. Seguía el mundo entero.
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