La joya que Pink Floyd permitió ser cantada por un extraño

tumblr_mkfm8cUS1n1rjojnno1_500«Come in here, Dear boy, have a cigar, you’re gonna go far. You’re gonna fly high, you’re never gonna die, you’re gonna make it, if you try; they’re gonna love you«.

Los fanáticos de culto de Pink Floyd nunca prefirieron la solemnidad de «Shine On You Crazy Diamond» ni la belleza cínica de «Wish You Were Here». Por encima de estas dos perlas, se sintieron fascinados con «Have A Cigar», el corte más rockero de aquella década para la banda que, sin embargo, tuvo una particularidad única en la historia del cuarteto.

Brian Humphries, el ingeniero de sonido de Wish You Were Here, dijo en un reciente documental sobre el disco que para dicha canción la voz de David Gilmour no era tan profunda y la ferocidad habitual en Roger Waters estaba ausente en aquellas sesiones de estudio, así que, aunque pareciera algo inaudito, todo apuntó a una solución tan drástica como bizarra: recurrir a alguien más en las vocales, un músico ajeno al grupo.

«Ambos sabían que no podían cantar ‘Have A Cigar’. Roy puso todo su empeño, aún puedo recordarlo entregándose en cuerpo y alma, como si su vida dependiera de ello», rememoró Humphries en tal documental.

Roy Harper era un viejo conocido que incluso había compartido cartel con los Floyd y trabajaba en 1975 en el estudio dos de los Abbey Road, muy cerca de la banda británica. En alguno de esos ratos de discusión entre Gilmour y Waters, Harper tomó la palabra y se ofreció a cantar aquella pieza… por un buen precio.

«El sencillo se repitió millones de veces alrededor del mundo, mi voz se oía en un sencillo número uno en ventas… y todos creían que era Roger. Eso me quebraba un poco los huevos», recordó el propio Harper, a quien Gilmour reconoció como el artista perfecto y correcto para tal misión.

Quien a la fecha aún se arrepiente por haber cedido su creación a la voz de un «extraño» es justamente Waters, el eterno celoso, el genio, el ególatra perpetuo.

«Si yo la hubiera interpretado, sonaría más vulnerable y menos cínica. Roy cantó una especie de parodia que nunca me gustó. Me arrepiento… y no porque tenga algo en su contra, pero creo que si yo hubiera perseverado, lo habría hecho mejor que él», dijo Roger.

Lo irónico del caso es que la letra de «Have A Cigar» criticaba fuertemente sobre la industria musical, en la cual las disqueras solían ganar dinero fácil con músicos «desechables» y Waters se arañó a sí mismo al prometer a Roy un abono de por vida para ver a su equipo preferido de cricket, lo que jamás cumplió. En lugar de ello, le dio las gracias y le envió un cheque por 200 libras, mismo que Harper no ha cobrado al día de hoy.

«Fue un insulto. Nunca imaginé que Roger me hubiese usado como al ‘Dear boy‘ del inicio de la canción, pero tristemente así fue»…

7 respuestas a “La joya que Pink Floyd permitió ser cantada por un extraño”

  1. Excelente historia

  2. Acabo de leer un reportaje sobre L.Z «grabaron 73 temas que duran 6 horas,23 minutos y 25 segundos,contenidas en ocho álbumes, a lo largo de doce años» de ser cierto, no es mucho lo que duran sus grabaciones, pero eso no ha impedido que resuenen hasta nuestros días con la misma fuerza que antes.

  3. Ya ves? y tu que dices que Roger es grande jajajajaja, a mi nunca me inspiró confianza y ahora resulta que fué ese tipo de igualado! no no, con ganas de mandarle a Sarah Connor a que le de una buena lección! jmmmmmmmmm

    tonto! tonto! tonto! asco iucckkkkkk jmmmmmm

    tqmmmmmm!!!

  4. estas son las rarezas que a tus seguidores nos gusta siempre leer! excelente post. abrazos.

  5. Ughhhhh ¡Esa no me la sabía!

  6. Ouch, qué fuerte y doloroso reconocer tal bajeza de un genio. Claro que no por ello se borra su genialidad y se puede ignorar lo bueno que es en lo que hace con su música. Me gusta

  7. Avatar de Fatima Figueroa
    Fatima Figueroa

    Amo a Roger, es un genio, pero que triste que sea haya comportado tan egolátra. También muchos hablan de más y quieren hacerlo ver cómo el villano, en fin, nunca sabremos a ciencia cierta qué sucedió

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